Algunas personas que hayan acudido a una ortopedia de sillas de ruedas en el Madrid de centro sabrán la importancia de las mismas. Es imposible vivir, si posees alguna discapacidad o tienes cualquier problema de movilidad, sin tu silla de ruedas. Te sirve para moverte, para salir de casa, incluso para hacer deporte.

A priori, en las ortopedia de sillas de ruedas en el Madrid de centro estas pueden parecer de diseño fácil, pero son muy complejas. Y dan la oportunidad de hacer logros increíbles a los seres humanos. Hoy te traemos la historia de Guillermo Aránguiz, una estrella del atletismo.

Guillermo Aránguiz nació con un problema de nacimiento que le hizo quedarse en sillas de ruedas. Aun así, fue afortunado. Los médicos no le daban ni seis meses de vida. Su problema: displasia de cadera y una escoliosis de columna.

A pesar de los malos pronósticos, el atleta siguió luchando por su vida y compitió en la modalidad de atletismo durante años. No solo eso: a sus treinta años es monitor de zumba. “Mi mayor motivación fue que a mi me gustaba mirar como hacían deporte... y después yo quise experimentarlo también, cosa que se transformó como en la rehabilitación, la recreación y luego poco a poco fui como creciendo con eso hasta que lo pude transformar en algo que lo que pudiera dedicarme, que iba asociado al tema de poder conseguir auspiciadores, dedicarme a tiempo completo a eso y la mayor motivación que tenía era esa, poder independizarme, además que me gustaba mucho y eso fue bien importante para poder salir adelante. Y es lo que hago también día a día, la motivación que tengo con mis clases de zumba”, relata el atleta.

Las sillas de ruedas guardan grandes historias de superación. En Ortopedia y Bienestar no solo fabricamos sillas, sino que creamos historias.